El spinning es un entrenamiento intenso que se centra tanto en la actividad cardiovascular, como en aumentar la resistencia física. Sobre todo si eres principiante, ten en cuenta estos consejos previos para preparar la clase de spinning porque de ellos depende obtener el máximo beneficio del pedaleo, evitando cualquier tipo de lesión.
Una sesión de spinning dura unos 45 minutos en los que el cuerpo trabaja en conjunto con especial incidencia en el tren inferior. A ritmo de la música, la clase se divide en tres partes: un calentamiento previo, una parte central, en la que se realizan cambios de ritmos en el pedaleo y también en la postura y un último tramo de cadencia decreciente para recuperar pulsaciones adaptar el organismo al fin de la actividad.
Es importante conocer la propia forma física y comentar con el entrenador la existencia de cualquier lesión para evitar que este duro entrenamiento pueda agravarla. Además, hay una serie de indicaciones que debes tener en cuenta antes de la clase de spinning.
Claves para un buen entrenamiento de Spinning
Reglar convenientemente la bicicleta de Spinning, colocarte en la postura correcta, llevar un equipamiento adecuado y tener claro cómo va a transcurrir la sesión son algunos de los detalles importantes antes de iniciar el pedaleo intenso que implica el spinning. Descubre cómo preparar tu primera clase de Spinning a continuación:
- Altura del manillar y del sillín. Para que el ejercicio resulte eficaz y saludable, no puedes empezar la sesión sin comprobar previamente que la bici se adapta perfectamente a tu constitución. El sillín debe quedar a la altura de tu cadera (compruébalo colocándote de pie junto a la bici). Coloca también el manillar de manera que te resulte cómodo, sin que, por estar demasiado alto o bajo, fuerce tu postura al pedalear. Lo ideal es que entre el sillín y el manillar haya una distancia equivalente a la medida de tu antebrazo.
- Equipamiento básico. Practicando spinning quemas una gran cantidad de caloría. Utiliza ropa cómoda y de secado inmediato para que el sudor no se quede adherido a tu cuerpo. Además, ten siempre a mano una toalla para retirar su exceso y una botella de agua, porque estar bien hidratado antes, durante y después del ejercicio, resulta fundamental. Beber sorbos pequeños de agua cada 10 – 15 minutos de pedaleo es una medida básica para evitar la deshidratación.
- Postura sobre la bici. Antes de arrancar la sesión, dedica unos minutos a encontrar la postura correcta. Tu columna vertebral debe estar lo más alineada posible, los hombros ligeramente hacia abajo para no “volcarte” sobre el manillar y tus pies rectos en los pedales, intentando que siempre estén en paralelo con el suelo para empujar hacia abajo, no hacia adelante. Recuerda, además, que tu rodilla no debe sobrepasar la punta del pie en cada pedaleo.
- Calentamiento previo. Como en cualquier otro deporte, es importante realizar unos estiramientos que preparen nuestros músculos y articulaciones para el esfuerzo que vamos a realizar. No puedes llegar al gym, subirte a la bicicleta y empezar a pedalear al máximo. Calentar y empezar la actividad a ritmo suave es una de las claves para un buen entrenamiento antes del spinning.
- Medir la intensidad. El pulsómetro resulta muy útil en este tipo de entrenamiento para controlar en todo momento el ritmo cardiaco y saber cuándo debemos reducir la intensidad. Si no dispones de él, tendrás que seguir las indicaciones del entrenador quien sabrá ir alternando las distintas cadencias en el pedaleo.
Si vas a asistir a tu primera clase de Spinning, teniendo en cuenta estas sencillas medidas antes de hacer spinning, podrás realizar un entrenamiento adecuado a tus capacidades mejorando marcas en cada nueva sesión.