El ser humano está hecho para moverse, y sin embargo, nuestra sociedad es cada vez más sedentaria. Se promueve una forma de vida más vaga de lo habitual, con cientos de inventos para que no tengamos que dar un paso. El estrés y el trabajo se apoderan de nosotros, y como no tenemos tiempo no movemos un dedo. Pero olvidamos que haciendo un poco de ejercicio, muchos de nuestros problemas se solucionarían.
No es de extrañar que, ante este panorama, surjan nuevas disciplinas que permitan a las personas que menos tiempo tienen, ganar algo de salud física y mental con ejercicios a su altura y a su ritmo. Una de estas disciplinas es el entrenamiento TBC, y presenta tan buenos resultados que no ha tardado en ponerse de moda.
¿Qué es el TBC?
El TBC responde a las siglas de Total Body Conditioning, lo que se traduce como acondicionamiento corporal total. Se basa en la combinación de diferentes ejercicios que trabajan todas las zonas del cuerpo utilizando diferentes elementos para ayudarnos, como steps, barras o mancuernas. Se trata de una disciplina similar al body pump que trabaja prácticamente todos los músculos del cuerpo.
Normalmente cuando queremos perder peso, quemar grasa y tonificar nuestro cuerpo, tenemos el problema de estancarnos en un ejercicio. Puede que al principio nos funcione, pero con el tiempo no servirá de nada. El TBC está pensado para evitar precisamente este punto. Se trata de un entrenamiento que combina diferentes tipos de ejercicios, para que la quema de grasa sea más eficaz.
Además, otra de las características del TBC que hacen tan atractiva esta opción, se refiere al tiempo que necesitamos para hacerlo, y es que, cada sesión solo te llevará media hora de tu tiempo. De esta forma tenemos un ejercicio completo en poco tiempo y con resultados de quema de grasa y reducción de estrés. Unas características que atraen a muchos.
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Ante de empezar con el entrenamiento TBC, debes saber que, al tratarse de ejercicios variados, podremos trabajar las distintas partes de nuestro cuerpo sin que haya un desequilibrio, lo que nos permitirá que las habilidades de nuestro cuerpo se desarrollen de manera fluida y a la par. Así, una clase de Total Body Conditioning se compone generalmente de las siguientes partes:
- Calentamiento aeróbico: este calentamiento que sirve para preparar los músculos y las articulaciones para el trabajo y tiene una duración aproximada de 10-15 minutos.
- Ejercicios de tonificación de diferentes partes del cuerpo, bien con el propio peso corporal o con aparatos específicos, como barras, mancuernas, gomas, etc. Suele tener una duración de 30-40 minutos.
- Abdominales.
- Estiramientos: tienen el objetivo de devolver elasticidad a los músculos y así prevenir calambres y lesiones.
¿Cuáles son los beneficios del entrenamiento TBC?
Ya hemos hablado de una de las principales ventajas del Total Body Conditioning, y es que, al solo durar 30 minutos, hace que resulte muy asequible para todos aquellos que andan justos de tiempo. Puede que pienses que ni siquiera dispones de esos 30 minutos al día, pero te aseguramos que, puedes ahorrar más tiempo con la liberación de estrés que si no paras a hacer ejercicio.
En el aspecto físico también ganamos. El TBC nos permite quemar grasa rápidamente, lo que hará que nos deshagamos de esos kilos de más que tanto nos molestan. Además, tonificaremos nuestro cuerpo y podremos mejorar la coordinación. Otro de los aspectos en los que ganaremos es en flexibilidad, lo que nos hará padecer menos riesgos de lesiones.
Por todos estos motivos, muchas personas deciden introducir el TBC en su rutina de entrenamiento. Se trata de una forma de reducir el estrés, sentirnos mejor tanto física como emocionalmente, y también rendir mejor en nuestro trabajo. Eso sí, recuerda que es necesario descansar bien y llevar una alimentación equilibrada para que el ejercicio tenga el mejor de los efectos.
