Es indudable que el embarazo deja secuelas físicas en el cuerpo de la mujer. Dependiendo del metabolismo y la contextura de cada mujer, el proceso por recuperar la figura tras el parto puede ser más rápido o más lento.
Sin embargo, al margen de ello, existen algunos pasos a seguir que ya han dado resultados fructíferos en madres de todo el mundo. Hay quienes siguen religiosamente la llamada dieta calórica, la cual consiste en prescindir durante tres semanas de él azúcar y las grasas, alimentándonos exclusivamente de carnes, huevos, pescados y verduras.
Este sistema es útil para bajar de peso rápidamente, pero debe ser complementado con ejercicio físico, para lograr tonificar el cuerpo. En tal sentido, los ejercicios más recomendables a realizar después del parto son el yoga y el atletismo, por espacio de media hora diariamente.
Otros factores que ayudan a bajar de peso después del embarazo, son la lactancia y evitar el estrés post parto.
Ejercicios para recuperar la figura tras el parto
Superada la cuarentena, es hora de retomar la actividad física. Además de seguir las recomendaciones de tu médico, puedes poner en práctica una serie de ejercicios para recuperar la figura tras el parto y volver a sentirte bien con tu cuerpo:
- Túmbate boca arriba, con las piernas flexionadas y los pies apoyados en el suelo, separados entre sí. Eleva la casera y respira hondo. Realiza series de 10 elevaciones y descansa 10 seguros aproximadamente entre ellas.
- Manteniendo la posición anterior, contrae los glúteos durante cinco segundo y relájalos 10. Realiza cinco rondas y respira profundamente.
- Recostándose en el suelo y realiza otra contracción de cinco segundos, pero solo con los músculos de la vagina (como si estuvieras aguantando las ganas de ir al baño). También durante cinco series. Puedes repetir este ejercicio varias veces al día, incluso estando sentada.
- Camina a un ritmo suave, manteniendo la contracción.
Recuerda que el cuerpo no responde igual al ejercicio después del embarazo. Los músculos, las articulaciones y los ligamentos estarán débiles durante algunos meses, por lo que no deberás excederte. Necesitarás mucha paciencia y tiempo de recuperación. Pasadas ocho semanas, caminar puede ser una excelente forma de retomar la actividad física. Eso sí, realiza cada ejercicio de forma suave y aumenta progresivamente la intensidad cada semana.