3 rutinas para entrenar en casa con la cinta de correr

Cómo entrenar con la cinta de correr

¿Es posible ponerse en forma desde casa con la cinta de correr? Si te has planteado el objetivo de bajar de peso, mejorar tu rendimiento cardiovascular o empezar a hacer ejercicio con regularidad, correr será el deporte perfecto. Se trata de una disciplina completa que te ayudará a mejorar tu salud y tu físico.

¿Cuáles son los beneficios de tener una cinta de correr? No disponer de un hueco para entrenar o que haga mal tiempo puede suponer una excusa. No obstante, si cuentas con una cinta de correr en casa, podrás crear tus propios horarios y hacer deporte unos minutos antes de ir a trabajar o al llegar a casa. Antes que nada, es esencial que sepas cuáles son las mejores cintas de correr en función de tus necesidades. Entre los principales elementos, destacan el precio, la velocidad máxima, el ruido, si tiene inclinación, el tamaño, la amortiguación, si es plegable o fija, así como las funciones de monitorización.

¿No sabes por dónde empezar o cómo debes desarrollar el entrenamiento? Te mostramos diferentes rutinas y ejercicios para que te pongas en forma. ¡Arrancamos!

Rutinas para entrenar con la cinta de correr

Estas tres rutinas son ideales para alternarlas durante tus entrenamientos y mejorar progresivamente:

Rutina 1: HIIT

El HIIT o High Intensity Interval Training hace referencia a alternar en una misma sesión periodos de alta intensidad con periodos de ritmo más suave.



El entrenamiento HIIT tiene múltiples beneficios para mejorar tu condición física. De hecho, realizar este tipo de carreras dos veces a la semana te permitirá quemar grasa, ganar fuerza y mejorar la potencia aeróbica. Además, cabe destacar que los entrenamientos interválicos siguen aportando beneficios una vez se ha finalizado el ejercicio, ya que aumenta el metabolismo y el gasto calórico durante las 24 horas posteriores.

Te proponemos la siguiente rutina de un total de 30 minutos:

Por un lado, calienta 10 minutos a carrera suave. Posteriormente, te ofrecemos diferentes niveles que puedes escoger en función de tu fondo o forma física.

  • Primer nivel: 20 segundos a ritmo rápido y 40 segundos a ritmo suave.
  • Segundo nivel: 30 segundos a ritmo rápido y 30 segundos a ritmo suave.
  • Tercer nivel 3: 40 segundos a ritmo rápido y 20 segundos a ritmo suave.

Después, vuelve a la calma con 10 minutos a ritmo suave o moderado.

Rutina 2: Entrenamiento con inclinación

La inclinación en la cinta es una opción ideal para incrementar la fuerza de tus piernas y aumentar tu resistencia.

Para empezar, deberás hacer un calentamiento a ritmo moderado durante 10 minutos. Una vez ya hayas puesto en marcha tu cuerpo, aumenta la inclinación dos puntos durante un intervalo de 5 minutos y vuelve al suelo plano. Haz 2 series de, por un lado, 10 minutos de velocidad alta y, por otro lado, 5 minutos de velocidad alta con inclinación. Por último, vuelve a la calma con otros 10 minutos a ritmo suave.

Rutina 3: Sprints

Muchas veces el tiempo es limitado y necesitas un entrenamiento rápido de menos de 20 minutos. En este caso, puedes recurrir a la carrera con combinación de sprints. Te ayudarán a aumentar tu potencia y tu velocidad en tiempo récord.

  • Primer sprint: Calienta corriendo a velocidad suave 5 minutos. Después, corre 2o segundos a la máxima velocidad y camina 40 segundos. Repítelo 10 veces y después vuelve a la calma otros 5 minutos a velocidad baja. Conseguirás un buen entrenamiento exprés de 20 minutos.
  • Segundo sprint: Primero camina 1 minuto, después corre 1 minuto a ritmo medio y por último, haz un sprint de 30 segundos. Repítelo 5 veces para trabajar 15 minutos de manera completa.

En resumen, estas sencillas rutinas te ayudarán a mejorar tu resistencia y potencia. ¡Busca un hueco y empieza a entrenar!