Seguir una dieta para perder peso puede producir en muchas ocasiones una fuerte necesidad de comer tentempiés entre las comidas para calmar el apetito. Sin embargo, picar entre horas puede convertirse en el peor enemigo de la dieta. La mayoría de nutricionistas recomiendan hacer cinco comidas al día, de las cuales el almuerzo y la merienda permiten aguantar el hambre entre las tres comidas más importantes del día.
El picoteo dentro de una alimentación equilibrada es posible si tenemos en cuenta la cantidad de grasas saturadas, azúcares y calorías que aporta. Consumir fruta, zumo o yogurt resulta la mejor opción si queremos picar entre horas sin engordar, aunque si bien es cierto que existen otros alimentos que también pueden ayudarnos a “matar el gusanillo” del hambre y que resultan tentempiés muy ricos y saludables.
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Consejos para picar entre horas de forma saludable
No tenemos que sentirnos culpables si queremos consumir un alimento en las horas previas a la comida. Es importante saber que la clave para picar entre horas es elegir el aperitivo adecuado y la cantidad idónea. A continuación, tienes una lista de consejos sobre cómo picar entre horas de forma saludable:
- Elige bien lo que comes. Si quieres picar entre horas, evita los snacks o aperitivos con muchas calorías como, por ejemplo, patatas fritas, galletas o chocolate. Puedes optar por picar fruta o embutido bajo en grasa en su lugar.
- Controla el picoteo. Pica algo a media mañana o a media tarde. Es importante no picar fuera de esos tiempos y, sobre todo, no picar más de dos veces al día, ya que podríamos provocar un descontrol en nuestra alimentación equilibrada.
- Cuidado con las raciones. Una vez hayas elegido lo que vas a picar, mide bien la ración y deja lo que te haya sobrado del alimento fuera de tu alcance. Así evitarás la tentación de consumir más de lo que deberías.
- No sobrepases las 200 calorías. Es aconsejable que el picoteo no supere las 150-200 calorías, aproximadamente. Cualquier pieza de fruta o verdura está por debajo de 200 calorías, por lo que puede ser la mejor opción. Basta con pesar el alimento y calcular las calorías de los alimentos antes de consumirlos.
- Pica después de hacer ejercicio. Si picas algo en la media hora siguiente a practicar ejercicio, estarás ayudando a tus músculos a recuperarse y repondrás las reservas de glucógeno disminuidas durante la actividad. Recuerda no consumir más de 200 calorías su premisa es picar entre horas sin engordar.
- Bebe agua. Acompaña el picoteo con agua y no con refrescos que puedan disparar la ingesta de calorías.
- Combina nutrientes. No cabe duda de que las frutas y las verduras son los aperitivos más saludables, No obstante, también puedes acompañar una pieza de fruta con un pedazo de queso, un trozo de pan, un yogurt o un puñadito de frutos secos. Cuanto más variado sea el snack, más se saciará nuestro apetito.
- Opta por los aperitivos caseros. Si te entra el hambre fuera de casa, es muy probable que acabes comprando un paquete de patatas fritas o unas chocolatinas en las máquinas expendedoras. Por eso, lo mejor es que nos traigamos nuestro propio aperitivo de casa: es más saludable y también más barato.
