El salir a correr puede resultar bastante contraproducente si nos encontramos cansados. La fatiga es un síntoma que refleja la necesidad de recuperación física de nuestro cuerpo, que no podemos pasar por alto. Cuando los músculos no descansan adecuadamente después de una sesión de entrenamiento nos arriesgamos a sufrir lesiones como esguinces, tendinitis, contracturas, desgarros y hasta desviaciones en la columna. Si sigues un programa de entrenamiento de atletismo debes mantener entre 24 a 48 horas de descanso entre cada día de trabajo.