No es ningún secreto que correr está de moda. Por todas partes vemos gente corriendo, en cualquier lugar y a cualquier hora, y es que, se trata de un deporte que obtiene innumerables beneficios y que cualquiera puede hacer. Eso sí, para correr hay que tener ciertas nociones de cómo hacerlo, o podemos sufrir un sinfín de lesiones.
Al correr nuestro cuerpo sufre, y uno de los dolores más habituales que sufren los runners es el de cadera. Se trata de una parte del cuerpo que concentra una gran tensión en su centro. Hay que tener en cuenta que es la encargada de que podamos andar, y si sobrecargamos la zona, podemos sufrir lesiones que nos frenen en nuestro entrenamiento. Además, algunos factores como la edad o el peso también afectarán a la hora de cargar demasiado esta parte de nuestro cuerpo. Descubre cómo puedes prevenir y aliviar el dolor de cadera al correr, a continuación.
Trucos para evitar el dolor de cadera al practicar running
Lo más normal cuando notamos dolor de cadera al correr es que la cadera se resienta durante el ejercicio y notemos un dolor punzante. Si esto nos pasa, lo conveniente es que acudamos a un especialista. Los síntomas son claros, pues sentiremos ese dolor no solo al correr, sino también al caminar. Si esto te pasa al practicar running, será mejor que sigas una serie de recomendaciones para conseguir aliviar este dolor y curar tu lesión:
1) Encuentra la causa
¿Has cambiado de zapatillas de running recientemente? ¿Entrenas en una superficie diferente últimamente? Existen diversas causas que pueden hacer que aparezca el dolor de caderas, y si este persiste al menos durante dos semanas, será importante que encuentres la causa y la corrijas, pues seguro que has hecho algún cambio que no te ha beneficiado en absoluto. Si por el contrario no ha variado nada en tu entrenamiento y aún así notas ese dolor punzante, será mejor que acudas a un traumatólogo para tratarlo de manera correcta.
2) Descansa el tiempo adecuado
Muchas veces, el sobreentrenamiento nos juega malas pasadas, y no tenemos más remedio que descansar una temporada. Si has apretado demasiado y querías avanzar demasiado deprisa, puede que lo hayas pagado caro. En este caso, lo más recomendable es que descanses después de hacer ejercicio y durante una temporada.
No cometas el error de forzar demasiado tu cuerpo cuando no puede más. Si el dolor persiste, seguir entrenando puede ser una equivocación que pagarás cara, y es que, hasta en el running, quien mucho corre pronto para.
3) Anticípate al dolor
Una buena técnica para anticiparse al dolor es prevenir. Y es que, aunque correr es un deporte saludable, puede que diferentes motivos no sean favorables para que corramos una maratón. Esas circunstancias pueden deberse, entre otras, a la forma de nuestras piernas o al tipo de pisada. Al correr, debemos utilizar las zapatillas adecuadas y una técnica adecuada para nosotros. De ahí la importancia de prepararse debidamente para según qué tipo de carreras.
Otra cuestión que debemos tener muy en cuenta es la de los estiramientos. Si después de correr no estiramos de la forma debida, podemos causar lesiones que nos impidan volver a entrenar. Por eso, aunque la parte fuerte de nuestro entrenamiento se centre en la carrera, deberemos tomar nuestro tiempo para estirar y cuidar nuestros músculos y articulaciones.
Por último, no debemos olvidar que con correr no basta, ya que requiere de una musculatura fuerte, por ello, si vamos a entrenar deberemos compensar con otros ejercicios que refuercen nuestra zona lumbar y abdominal. Por supuesto, también deberemos cuidar nuestra alimentación e hidratarnos debidamente. Y es que, correr es bueno, pero hacerlo erróneamente puede resultar desastroso.
