¿Alguna vez has oído hablar de la termoterapia? Es un tipo de tratamiento preventivo que se basa en la aplicación de calor, de forma que el cuerpo y los músculos entran mucho más rápido en calor y evitamos la aparición de problemas físicos y musculares fruto de la práctica deportiva. Las famosas esterillas eléctricas no nos sirven para este propósito, ya que evidentemente no se pueden utilizar en los entrenamientos; pero tenemos opciones tan interesantes como los parches adhesivos de calor para el entrenamiento.
Qué aportan los parches de calor
El calor es un vasodilatante, que dilata venas y arterias facilitando la circulación sanguínea, lo que nos ayuda a elevar la temperatura. Este efecto dilatador también actúa como analgésico y relajante muscular, de forma que nos ayuda a hacer frente al dolor que muchas veces aparece con el ejercicio físico. Conviene resaltar que los parches adhesivos de calor son un producto más que interesante para los deportistas aficionados, que no tienen los medios de un profesional para hacer frente a este tipo de problemas.
Son de gran utilidad tanto en momentos puntuales como para problemas crónicos como son la artritis o los dolores menstruales, que el calor nos ayuda a aliviar. Más allá de los dolores musculares, articulares y crónicos, la aplicación de calor también es un buen remedio para combatir al cansancio o hacer frente a la tensión muscular, los esguinces o las distensiones. Por su carácter preventivo, te puedes poner el parche antes de hacer deporte si sabes que tras hacer ciertos ejercicios aparece el dolor, de forma que evitamos su aparición.
No podemos pasar por alto que el cuerpo cambia de temperatura según ciertos factores, pero el uso de los parches de calor nos permite mantener la temperatura corporal, algo muy interesante en especial mientras dormimos. De esta forma evitamos despertarnos con esos dolores matutinos que tanto nos molestan. En este sentido regulador, en verano también nos ayudan a combatir los efectos del aire acondicionado, culpable de las contracturas y molestias musculares que suelen aparecer en los meses más calurosos del año.
Dónde comprar parches de calor
Es muy fácil encontrar parches de calor en Internet, pero la compra online de estos productos solo debe hacerse en sitios de especial confianza como Shop Farmacia, que nos garantiza unos parches adhesivos de calor de máxima calidad y a un precio con el que nadie puede combatir. Si te decides a comprarlos en otros sitios que no son de confianza te arriesgas a recibir unos parches que no funcionen, de mala calidad o que incluso pueden resultar perjudiciales, algo que no pasará si compras en Shop Farmacia.
Cómo utilizar los parches de calor
Los parches adhesivos de calor funcionan como un apósito cualquiera. Hay que aplicarlos sobre la zona dolorida, pegándolo sobre la piel. Esta debe estar seca, y no puede presentar lesiones como heridas, cortes, eccemas, etc. Para colocarlo, basta con desprender la cubierta del apósito y pegar la cara adhesiva del parche sobre la piel. Debes mantener el parche un mínimo de 4 horas sobre la zona dolorida, retirándolo como mucho a las 8 horas de su aplicación.
Para quitarlo, basta con desprender una esquina del apósito y levantarlo suavemente para no hacerte daño. No deberíamos utilizar más de un parche al día, aunque en caso de necesidad podemos aplicar el siguiente parche a las 12 horas de retirar el anterior. Siempre existe la posibilidad de que no empieces a notar el calor cuando lo apliques, sino que el efecto tarde unos 20 o 30 minutos en sentirse. Es algo completamente normal, no tienes de qué preocuparte. A medida que sientas el calor, notarás como mejora ese dolor.