La genética determina cómo somos y qué podemos hacer para conseguir el nivel físico aceptable. No obstante, estas reglas se pueden doblegar si se afronta un entrenamiento de forma inteligente.
Por lo tanto, si tenemos que hablar de los tres tipos más comunes que se presentan en la actualidad sería; el ectomorfo, el mesomorfo y el endomorfo.
Por tal motivo, si ya descubriste que tipo de cuerpo es el que se te asemeja, entonces estos consejos te serán de gran ayuda al hora de entrenar:
- Para los Ectomorfos es ganar masa porque su metabolismo es rápido, por eso deben realizar entrenamientos cortos con movimientos de potencia.
- El Mesomorfo, es un culturista por naturaleza, ya que tiene bastante masa muscular y no requieren de un entrenamiento para obtener buenos resultados.
- El Endomorfo, es un tipo que gana masa con bastante facilidad. Su predisposición es acumular grasa, por lo tanto se requiere que realices altas repeticiones y bastante ejercicio cardiovascular para así reducir el tejido adiposo y ganar músculo.