Si tus obligaciones diarias no te permiten salir a correr durante el día, es posible que tengas que claudicar y empezar a adquirir el hábito de salir correr por la noche. En los meses de verano, probablemente hasta agradezcas practicar running en horario nocturno. Sin embargo, durante el invierno, tanto el frío como la hora temprana a la que anochece, pueden suponer un freno a la hora de practicar tu deporte favorito.
Si te encanta el running y quieres practicarlo por la noche, no te pierdas las recomendaciones que te indicamos a continuación.
¿Cómo correr de noche con seguridad?
¿Quieres empezar a correr por las noches? ¡Por supuesto que se puede! No existe una regla establecida que diferencie si correr por la noche es bueno o malo. De hecho, y para que te animes a hacer running a última hora del día y además, lo hagas de una forma completamente segura, no dudes en seguir estos 8 consejos prácticos para correr de noche:
1. Utiliza ropa reflectante
Cuando salgas a correr de noche, debes prestar atención a tu equipamiento como runner: intenta llevar siempre puesta al menos una prenda reflectante. Y es que, uno de los mayores peligros que entraña correr de noche es, precisamente, que los demás no nos vean, especialmente los coches, la gente que monta en bicicleta, incluso, otros corredores.
2. Siempre de cara al tráfico
Cuando corras por alguna carretera o calle que no tenga acera, es fundamental para tu seguridad que escojas el arcén por el que ves pasar a los vehículos de frente. Este simple gesto te puede ahorrar muchos sobresaltos, especialmente si sales a correr de noche.
3. Deja la música en casa
Es posible que hayas encontrado en la música a la compañera perfecta durante los ratos de running nocturno. Sin embargo, si corres de noche, deja mejor los cascos en casa. Y es que, al correr de noche, necesitas estar más atento a todo lo que ocurre a tu alrededor, y la música puede suponer una distracción muy peligrosa. Esto también sucede con los gorros en invierno, que nos tapan parte de las orejas y nos restan capacidad auditiva mientras corremos. Por ello, si te gusta correr con gorro, evita que éste te cubra completamente las orejas.
4. Llévate el móvil
Si vas a correr por zonas demasiados alejadas de la civilización, y además es de noche, lo mejor que puedes hacer es llevarte el teléfono móvil por si te surge algún percance o accidente.
5. Luz portátil
Si por el contrario, en vez de correr por un lugar solitario, vas a hacerlo por el borde de una carretera o de una zona con mucho tráfico, lo mejor es que además de la ropa reflectante, lleves también contigo una luz portátil pequeña.
6. Mira antes de cruzar la carretera
Aunque pueda parecer un consejo innecesario porque todo el mundo sabe que hay que mirar bien antes de cruzar una calle o carretera, cuando corras de noche es necesario que además de mirar antes de cruzar, busques también un contacto visual con el conductor. De esta forma, puedes tener mayor certeza de que éste va a frenar su vehículo para dejarte cruzar.
7. Lleva tu documento de identificación
Tanto si es de día como si es de noche, es recomendable que lleves siempre encima alguna identificación con tus datos básicos (nombre completo, teléfono de contacto de algún familiar, domicilio, etc.).
8. ¿Correr antes o después de cenar?
Siempre que sea posible, intenta salir a correr antes de cenar y no lo hagas inmediatamente después de haber cenado. Y es que, al salir a correr después de una comida fuerte (aquella que supera las 500 calorías), incrementa las posibilidades de sufrir calambres musculares o lesiones deportivas por la falta de irrigación sanguínea, incluso dolor de estómago o reflujo.
Sin embargo, si sueles cenar temprano y dejas un margen suficiente a tu estómago para hacer la digestión, puedes beneficiarte de salir a correr antes de dormir, ya que el running te ayudará a llegar más relajado a la cama cada noche.