Se utilizan desde hace tiempo en distintos tipos de entreno, pero están más de moda que nunca. Los discos deslizantes tonifican la musculatura y ayudan a moldear la silueta. Inclúyelos en tu rutina de ejercicios para mantenerte en forma y mejorarás tu equilibrio y coordinación de movimientos.
¿Cómo entrenar con los gliding discs?
Estos finos discos, fabricados en tejido suave y resistente, se pueden colocar en las manos y en los pies para realizar distintos movimientos que trabajen todos los grupos musculares. Es lo que también se conoce como entrenamiento gliding y cosiste en hacer los ejercicios de una manera distinta, con la dificultad añadida de que nuestras manos y pies se deslizan mientras los realizamos.
Es divertido para incorporarlo a tu entrenamiento en casa, pero además tremendamente eficaz porque tonificar el cuerpo con los discos deslizantes implica desarrollar una intensa actividad cardio que no solo quema una importante cantidad de calorías, sino que incrementa la fuerza y la agilidad en general.
Si entrenas con gliding disc o discos deslizantes, trabajas con tu propio peso, sin impacto (no despegas los pies del suelo) y no necesitas más accesorios que los propios "glidings". Puedes hacer multitud de ejercicios, algunos muy sencillos y otros que entrañan cierta dificultad. En cualquier caso, se trata de una actividad ideal tanto para principiantes como para personas que entrenan de manera habitual y quieren variar en sus rutinas.
Ejercicios con discos deslizantes para fortalecer la musculatura
Brazos sin flacidez, glúteos firmes, piernas bien contorneadas y sin grasas acumuladas, core como una roca… Entrenar con discos deslizantes da excelentes resultados si el objetivo es perder pero y tonificar.
Hay que recordar que como en cualquier otro entreno un buen calentamiento es importante. Además, debes empezar con ejercicios básicos del entrenamiento gliding hasta que domines la técnica del deslizamiento. El equilibrio es fundamental para no acabar en el suelo. Empieza con movimientos suaves y, poco a poco, incrementa la dificultad. Los movimientos deben ser cortos y rápidos.
Entre los ejercicios con discos deslizantes que no deben faltar en tu rutina destacan:
1. Tijeras. De pie, con las piernas ligeramente separadas y pisando un disco con cada uno de tus pies haz “tijeretas”. Adelante primero una pierna, vuelve a la posición inicial y, seguidamente adelanta la segunda. Parece muy fácil pero se trata de hacerlo lo más deprisa que puedas. Prueba, también a avanzar como si caminases (siempre con tus pies en los discos). Si te fijas, ése movimiento recuerda al que realizan los patinadores. Puedes completar el ejercicio haciendo aberturas laterales. Abre y cierra las piernas deprisa. ¡fácil y efectivo!
2. Apertura de brazos en posición plancha. Tumbada boca abajo haciendo la plancha, coloca los discos en tus manos, que deberán quedar a la altura de tus hombros. Intenta separa tus brazos hasta la distancia que puedas y regresa a la posición inicial. Es un ejercicio con discos deslizantes realmente duro pero ideal para tonificar brazos. Si la plancha te cuesta mucho, puedes hacerla con las rodillas apoyadas.
3. Zancada. Excelente para trabajar las piernas y aumentar tu equilibrio y coordinación. En posición vertical, con un disco en cada pie, haz la zancada, adelantando una de tus piernas hasta doblar la rodilla de manera que forme un ángulo de 90º. La otra pierna debe quedar extendida. Aguanta, vuelve a la posición inicial y cambia de pierna.
4. El escalador. Tonifica el conjunto de tu musculatura con este ejercicio con discos "gliding". En posición de escalador (boca abajo apoyándote en los brazos estirados y en los dedos de tus pies), coloca los discos bajo tus pies y realiza el movimiento “climber”, es decir, recoge una rodilla, llevándola al pecho, estira a continuación y haz lo mismo con la otra Siempre con movimientos rápidos. Con los discos, la dificultad del ejercicio se incrementa y sus resultados, también.
5. Sentadilla con pierna estirada. De pie, con las piernas algo separadas, desciende haciendo la sentadilla al tiempo que estira una pierna lateralmente (siempre con los discos). Vuelve a la posición inicial y cambia de pierna intentando, en todo momento, mantener el equilibrio.
