Sufrir asma no tiene por qué ser un impedimento para correr o hacer deporte. Muchos runners son capaces de correr con asma, si bien, toman las correspondientes precauciones y lo consultan previamente con su médico. Es posible hacer running con asma siempre y cuando nos sometamos a un examen médico para que un profesional evalúe nuestras condiciones físicas.
Es extremadamente importante detener la actividad, ya sea el running o los ejercicios, cuando sientas fatiga o falta de aire, y que tomes a diario la medicación para evitar problemas mayores.
¿Se puede salir a correr con asma?
La respuesta es sí. Sí puedes salir a correr con asma y hacer ejercicio, aunque debes tener en cuenta algunas consideraciones. A continuación, te indicamos algunos consejos que debes tener en cuenta si eres asmático y quieres practicar running:
- Tu patología debe estar controlada por un médico, ya que es importante saber el grado de obstrucción que tienes o qué efectos tiene el ejercicio en tu respiración.
- Realiza un buen calentamiento, prolongado y progresivo, antes de practicar cualquier actividad deportiva. Realiza ejercicios suaves hasta alcanzar una intensidad moderada o con esfuerzos “progresivos” como, por ejemplo, hacer múltiples sprints aumentando la velocidad progresivamente durante unos 30 segundos y a intervalos de uno o dos minutos.
- Intenta evitar el aire frío, puesto que genera un aumento en la bronco-constricción y respirar te resultará más complicado. Recuerda que el clima que más favorece al asmático es el clima húmedo y cálido, más parecido a las condiciones que da la nariz al aire.
- Controla la respiración: acuérdate de respirar por la nariz y expirar por la boca.
- Si se produce una descompensación, tos o sibilancias es recomendable que no realices ejercicio. Puedes hacer ejercicios de estiramientos o relajación que te ayuden a estabilizar la respiración.
Recuerda que Running y asma son compatibles, pero siempre con precaución.
