Hacer deporte tiene múltiples beneficios para nuestra salud. Sin embargo, a veces no sabemos por dónde empezar o cómo realizar los ejercicios con la técnica adecuada. En este caso, existe la figura del entrenador personal, que tiene la función de ayudar a que las personas consigan sus objetivos de forma más rápida y eficaz.
Comentamos, a continuación, las funciones principales que tiene este profesional y qué tipo de formación necesita para ello. ¡Sigue leyendo y toma nota!
Principales funciones de un entrenador personal
El entrenador personal o personal trainer es el profesional que se encarga de diseñar un plan de entrenamiento individualizado según las necesidades de cada persona. Sus principales funciones son:
Programar y supervisar la rutina de entrenamiento
Durante las sesiones de entrenamiento, una de sus principales funciones es pautar los ejercicios a realizar y supervisar que los individuos hacen los ejercicios de forma correcta. De este modo, con la técnica adecuada, se evitará la aparición de lesiones.
Evaluar la evolución física del usuario
Y, además de planificar la rutina deportiva, otra de sus tareas es evaluar la evolución física de los clientes. En este caso, equipo como básculas, cintas métricas y antropómetros son esenciales para calcular el progreso de los clientes.
Proporcionar el equipamiento para entrenar
El entrenador personal utiliza una serie de recursos y herramientas para ejecutar los diferentes ejercicios, como por ejemplo barras, pesas o bandas elásticas.
Es de suma importancia que el espacio donde se encuentran las máquinas y aparatos sea lo suficientemente espacioso, luminoso y ventilado. De este modo, los usuarios podrán sentirse cómodos y disfrutarán de las rutinas sin percances.
Las diferentes áreas pueden medirse fácilmente con la ayuda de una cinta métrica, logrando así que cada zona tenga el espacio que requiere.
Motivar a las personas
El personal trainer también se encarga de motivar a los clientes para que consigan realizar un buen entrenamiento y no tiren la toalla ante las dificultades.
¿Qué requisitos y formación hace falta para ser entrenador personal?
Para convertirte en entrenador personal, no solo basta con hacer deporte o estar en buena forma física. Los profesionales que se dedican a este sector deben contar con una sólida formación en materia de entrenamiento.
Por tanto, el salario de estos profesionales depende, en gran medida, de los cursos que tengan en su currículum, así como su experiencia y el nivel económico de los clientes que tenga. En este caso, también resulta relevante si trabajan de forma autónoma o están contratados por un centro deportivo.
Tipo de formación
Uno de los principales requisitos para ser entrenador personal es tener una formación académica específica. Es decir, conocer el cuerpo humano y saber cuáles son los ejercicios esenciales para trabajar cada zona del cuerpo y poder realizarlos de forma correcta.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que la profesión de entrenador personal no cuenta con una titulación específica para ello. A día de hoy, se puede acceder a esta profesión con la siguiente formación:
- Grado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte (CAFyD)
- Técnico Superior en Acondicionamiento Físico (TSAF).
- Máster de entrenamiento personal.
- Cursos de entrenador deportivo que estén homologados.
Sin embargo, el Grado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte es el que ofrece una formación más completa. Se trata de una carrera que permite aprender diferentes disciplinas deportivas, obtener una buena técnica y obtener los conocimientos necesarios sobre el mundo del deporte.
Dotes de comunicación
Tener una buena capacidad de comunicación resulta esencial para este profesional, ya que necesita tener suficiente fluidez para explicar las rutinas deportivas diseñadas para sus clientes.
Por tanto, será crucial poder trasmitir cómo deben realizar los ejercicios y corregir los principales errores que cometan los usuarios.
En el plano personal, el hecho de ser empático también ayuda a comprender mejor las motivaciones reales de cada persona. Así, los clientes se sentirán seguros y acompañados durante las sesiones de entrenamiento.
Constancia y compromiso
El compromiso y la constancia son dos cualidades fundamentales en el perfil de un personal trainer. En este sentido, será muy importante que el profesional cumpla con los horarios de entrenamiento fijados con los usuarios y resuelva las dudas que les puedan surgir.
De esta manera, el profesional proporcionará una mayor confianza a los clientes y estarán más satisfechos con sus servicios.