Realizar actividad física con frecuencia es importante para nuestro futuro y también para nuestro presente. El deporte nos hace sentirnos con más energía, mejora nuestra salud cardiovascular y muscular y ayuda a combatir el estrés.
El ciclismo es uno de los deportes más completos y que más beneficios aporta para nuestra salud y nuestra condición física. Sin embargo, no siempre es posible salir de ruta con nuestra bicicleta, ya sea por el clima o el tiempo del que disponemos.
Por tanto, contar con una bicicleta estática en casa es una solución ideal con la que no perder nuestra rutina de ejercicio y mantenernos en forma.
Las ventajas del deporte y del ciclismo para nuestra salud
A la hora de cuidar nuestra salud y nuestro físico, no hay nada como una buena sesión de bicicleta con la que activar todo nuestro cuerpo y así alcanzar los resultados que buscamos. Para ello, es imprescindible contar con el equipamiento adecuado, siendo posible encontrar las bicicletas online que mejor se adaptan a nuestras necesidades.
Las rutinas de entrenamiento con bicicleta estática proporcionan una buena condición cardiovascular, al favorecer el bombeo continuo de sangre y ser uno de los ejercicios aeróbicos más beneficiosos.
Además, mejora y potencia el desarrollo de la musculatura, especialmente en el tren inferior. Se trata de uno de los grupos musculares que más se activan durante el ejercicio. Pero, a su vez, también resultan beneficiosas las rutinas con bicicletas estáticas para el desarrollo de la musculatura de la espalda.
Otra de las ventajas del ejercicio con bicicleta estática es que ayuda a perder grasa y a controlar el peso al ser ejercicios con gran demanda calórica, lo que nos ayudará a alcanzar nuestros objetivos de forma física.
A ello se suma que la práctica de actividad física es una gran manera de liberar estrés y conseguir desconectar. Ello repercute en nuestra salud mental y en nuestro bienestar general, algo fundamental en nuestro día a día.
Tres rutinas con bicicleta estática para estar en forma
A la hora de realizar nuestra rutina con la bicicleta estática, existen diferentes formas de programar el ejercicio. Te contamos tres rutinas preparadas en función del tiempo y velocidad y para la pérdida de grasa. ¡Apunta!
Pérdida de grasa
La primera de las rutinas, enfocada en la pérdida de grasa, comenzará con un calentamiento a ritmo suave de diez minutos. Tras ello, se realizan ocho o diez series de veinte a treinta segundos pedaleando a máxima intensidad, intercalando descansos de igual tiempo entre cada serie.
Resistencia
La segunda de las rutinas, cuyo énfasis es la mejora en el rendimiento de resistencia, comenzará con un calentamiento de cinco minutos a ritmo suave. Progresivamente, se aumentará la intensidad durante los siguientes treinta a cuarenta minutos y se finalizará con cinco minutos de ritmo suave para enfriar.
Para ir mejorando los resultados, la clave está en realizar un entrenamiento con sobrecarga progresiva de la intensidad y duración de la rutina.
Rutina exprés
Por último, para quienes solo disponen de unos minutos al día, existen entrenamientos calculados en función del tiempo, como este entrenamiento de quince minutos.
Este se iniciará con un calentamiento de cinco minutos y otros cinco a ritmo intenso. Durante la actividad, se alternará la posición. Primero sentado treinta segundos y después de pie otros treinta segundos. Se sumará un minuto al máximo nivel de entrenamiento y los últimos cuatro se irá reduciendo intensidad hasta finalizar.
En definitiva, hacer actividad física diaria o con frecuencia es esencial para nuestra salud y el ciclismo ofrece muchas ventajas. Además, con una bicicleta estática, podrás practicarlo cómodamente desde casa y lograr tus objetivos con notable éxito.