La alimentación guarda una relación directa con nuestras actividades diarias. Las personas que llevan un estilo de vida sedentario requerirán de una dieta diferente a la de los deportistas. Por tal razón, si eres de los que pasan demasiado tiempo sentado, te convendrá comer diariamente ensaladas crudas o cocidas, pescado como mínimo tres veces por semana, un vaso de leche o yogurt dos veces al día y mucha agua o infusiones. Ten presente que la clave de la nutrición para los sedentarios no está en la abstinencia, sino en el equilibrio, por eso evita repetir alimentos ricos en calorías o grasas durante el mismo día.