El ejercicio cardio es perfecto para quemar el exceso de grasas acumuladas y conseguir un excelente tono muscular. Aprovecha el equipamiento disponible en tu gimnasio y toma nota de algunos consejos para usar las máquinas de cardio correctamente, a continuación.
La bicicleta estática o la de spinning, la cinta andadora o la elíptica son algunos de los aparatos que pueden ayudarte a quemar calorías y mantenerte en forma. Son fáciles de utilizar y aportan multitud de beneficios a la hora de hacer ejercicio. Con ellas, pones en marcha tu corazón mejorando la circulación sanguínea al tiempo que logras una mayor definición del conjunto de tu musculatura. Perder peso y aumentar tu resistencia es posible con el óptimo ejercicio aeróbico que pueden proporcionarte estos aparatos.
Para sacar partido a cada minuto que pasas trabajando en las máquinas de cardio es importante conocerlas bien y no olvidar algunas pautas para utilizar los equipos cardio adecuadamente.
Las claves del entrenamiento en las máquinas de cardio
Son muchas las ventajas que ofrecen los equipos de cardio a la hora de realizar un entrenamiento aeróbico, pero a veces no obtenemos su máximo rendimiento por errores a la hora de trabajar con ellas. Fíjate en algunos detalles que harán que utilices correctamente las máquinas básicas del entrenamiento cardiovascular.
1. Adecúa la máquina a tus necesidades concretas
La altura del sillín y del manillar de la bici, la resistencia de la elíptica o la inclinación de la cinta de correr… Es un error común subirte a una máquina de cardio y empezar a entrenar sin comprobar previamente estos detalles, que son fundamentales para que puedas utilizarla de manera adecuada y optimizar tu entreno. Debes controlar ,además, la resistencia que te ofrece el aparato para que el ejercicio que vas a realizar tenga la intensidad justa que tú necesitas para mejorar. Si, por ejemplo, no te cuesta nada darle a los pedales, o, por el contrario, cada pedalada te supone un inmenso esfuerzo… La máquina cardio no está funcionando como debiera.
2. Tu postura
El buen uso de una máquina de cardio depende en gran medida de tu postura de inicio y de cómo mantengas el cuerpo durante todo el ejercicio. Si sobre la elíptica mantienes abdomen y glúteos contraídos, no solo quemarás más calorías sino que fortalecerás el área del core, duplicando, así, la eficacia del aparato.
3. Cambia tus rutinas
Es la clave para sacar máximo partido a las máquinas cardio del gym. Si sobre ellas siempre realizas el mismo entreno, con los mismos tiempos y ejercicios, tu cuerpo se acostumbrará a un nivel de esfuerzo constante y la máquina perderá eficacia. En la variación está el éxito. Cambia tu velocidad sobre la cinta de correr, incluye algún intervalo de alta intensidad o intercala minutos de caminata en cuesta; prueba a andar hacia atrás en la elíptica o a remar “contracorriente” en la máquina de remo… Si cada día pedaleas los mismos minutos y al mismo ritmo, no estás utilizando la máquina de cardio correctamente.
4. Incrementa el esfuerzo de forma progresiva
Aunque vayas a trabajar con equipos del gymn, el calentamiento sigue siendo fundamental para que tu esfuerzo de los resultados esperados. Además, cuando inicies el ejercicio en cualquier máquina de cardio, empieza siempre a ritmo suave y ve, poco a poco, aumentado la intensidad. Controla tu ritmo cardiaco comenzando con un esfuerzo que no suponga más del 50% de tu capacidad y ve incrementándolo hasta alcanzar el 60% - 75% (siempre dependiendo de tu condición física).
5. Constancia
Los aparatos disponibles en el gimnasio son una ayuda para diseñar nuestro entrenamiento semanal pero no hacen milagros. Utilizar bien las máquinas de cardio requiere constancia a la hora de entrenar. Si tu objetivo es mantenerte en buena forma, deberás ejercitarte en ellas al menos dos veces por semana en sesiones de 20 – 30 minutos. Si además, quieres perder algunos kilos, lo ideal es hacer un entrenamiento aeróbico, en máquinas como la cinta, la bicicleta o la elíptica, que tenga una duración mínima de 40 minutos. Notarás los resultados de tu esfuerzo en menos tiempo del que crees.
