Existen diferentes tipos de lesiones de ingle, que afectan a quienes practican determinados deportes. Una de ellas, es la conocida como la ingle de futbolista. Tal como lo señala su nombre, esta lesión suele ser común en el caso de los que practican dicho deporte, así como en algunos corredores.
Su tratamiento es lento y exige la suspensión de todas las actividades deportivas por un mínimo de seis semanas. El proceso de recuperación requerirá de ejercicios graduales, para agilizar y mejorar los tendones poplíteos del tendón de aquiles y de los cuádriceps.
Otra lesión común en dicha área es la distensión de ingle. Cabe señalar, que ésta es una de las lesiones deportivas más difíciles de tratar. Su tratamiento exige mucho reposo y baños curativos.
Asimismo, luego de aliviado el dolor, el atleta deberá llevar a cabo una rehabilitación física, hasta recuperar la flexibilidad y fuerzas necesarias para retomar la práctica deportiva.
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