Las lesiones en el codo suelen ser muy comunes en la práctica de ciertos deportes. Una de las más conocidas es el codo de tenista. Esta lesión es la consecuencia del esfuerzo sobre los músculos extensores y supinadores del antebrazo. Con mayor frecuencia, se presenta en personas que practican tenis, boxeo, karate o judo.
El codo de tenista provoca dolor al realizar acciones tan cotidianas como el encender el auto o abrir la puerta. Las formas más comunes de tratarlo son por medio de la fisioterapia y las infiltraciones con corticoides.
Asimismo, tenemos al codo de golf o de lanzador de jabalina. Esta lesión se produce por el movimiento del brazo al lanzar, debido a que se aplica una fuerza considerable sobre el codo.
El codo de golf puede ser una lesión de cuidado en el caso de los niños, ya que compromete al sistema óseo, siendo necesaria la operación. De tratarse de un adulto, la mejor solución será descansar de las actividades deportivas durante algunas semanas, así como la aplicación de hielo y ultrasonidos.
Saber más sobre las lesiones deportivas
