Boxeo femenino
Los registros de competencias boxísticas entre mujeres, datan de fines del siglo XVIII, aunque oficialmente, esta práctica deportiva recién se institucionalizó en la mitad del siglo pasado.
En los últimos años ha ido adquiriendo una mayor aceptación y popularidad mundialmente, sin embargo aún cuenta con algunas exclusiones como en los juegos olímpicos.
El boxeo femenino, sin duda alguna, deriva del masculino en concepto y técnica, no obstante, debido a las evidentes diferencias físicas entre un sexo y otro, destacan excepciones en la contextura de sus participantes.
Las categorías son similares a las del boxeo masculino, pero presentando equivalentes inferiores para cada una de ellas. Por ejemplo, el peso pesado en varones no baja de las 200 libras (90,72 kg), mientras que en las mujeres se le considera a partir de las 175 libras (79,37 kg).
También cabe señalar que el boxeo femenino presenta un límite de peso establecido en 189 libras (86 kg), que no existe en el masculino.
