Ahora, hablaremos acerca de las plantas que pueden colaborar en aumentar nuestras defensas.
La echinacea es una planta rica en echinacósidos, el cual produce un resultado estimulante en la producción de leucocitos y generar polisacáridos de propiedades antivíricas.
La uña de gato es otra planta que presenta una acción inmunoestimulante a los alcaloides, isomitrafilina y pteropodina, que acrecientan la actividad fagocítica de los granulocitos neutrófilos además de macrófagos, contribuye estimulando la producción de Sofoquinas siendo antiviral también.
Otras plantas de utilidad son el astrágalo, que posee una capacidad inmunoestimulante, regaliz que impide el desarrollo de microorganismos.
Podemos añadir al hongo, también conocido como reishi, que puede actuar como inmunorestaurador en personas con supresión inmunológica de suave hasta moderada.
Todas las plantas se pueden suministrar por las mañanas y se puede repetir varias veces las tomas durante el día, según los casos.