Muchas personas tienen dificultades para seguir una dieta con un horario fijo, ya que las horas en las que tienen tiempo para comer no son siempre las mismas. Esta situación es cada vez más común debido a la carga de trabajo o estudios que se imponen.
En estos casos, se recomienda distribuir más proporcionalmente la comida que se ingiere a lo largo del día, en lugar de comer mucho en las noches y poco durante la mañana y la tarde. El desayuno si debe ser abundante, aunque no excesivo, y se recomienda llevar en la bolsa o la mochila algún tentempié que contenga pocas calorías.
Las frutas son bocadillos ideales para este fin. Ocupan poco espacio, son saludables y contienen pocas calorías, salvo excepciones. A lo largo del día trata de consumir vegetales, fibras, carnes magras y toma infusiones como el té verde.
