Aunque esta disciplina se basa en movimientos pausados y posturas determinadas que hay que mantener unos minutos, no creas que no resulta un efectivo trabajo a nivel de tu musculatura. Fíjate en cómo puedes ganar definición en tus abdominales con la práctica del yoga.
El objetivo básico del yoga es trabajar por igual el cuerpo y la mente con el objetivo de alcanzar la relajación y el equilibrio interior. Son muchos los que creen que puede no ser la mejor idea para conseguir un vientre plano y un core firme y tonificado. Lo cierto es que una clase de yoga puede ser tan efectiva para definir tu abdomen como una dura sesión de entrenamiento en el gym.
Mantener cada una de las posturas (asanas) que puedes hacer en una sesión de yoga, supone tensionar la musculatura de una zona determinada para, posteriormente, volver a relajarla. El paso de una postura a otra también supone un esfuerzo que combina la fuerza muscular, la flexibilidad de las articulaciones, el control de la respiración y la concentración en el propio movimiento.
El yoga es una disciplina completa y su tu objetivo es tener una figura ágil y esbelta, una rutina de yoga puede definir los abdominales casi sin darte cuenta, porque tus músculos estarán realizando un duro trabajo pero de manera suave y fluida, sin la “presión” que podría suponerte intentar completar una serie de repeticiones a un ritmo a veces costoso de mantener.
Las mejores asanas para definir tus abdominales
Hay que recordar que el yoga ejercita el cuerpo en su conjunto. Cualquier asana que realices requerirá el movimiento armónico de todos tus músculos y articulaciones. Esta disciplina no está pensada para obtener un six pack lo antes posible, sino para ganar fuerza y definición en el core, punto esencial del equilibrio de nuestro organismo.
Aun así, hay algunas posturas que exigen un mayor esfuerzo a toda la zona abdominal: abdominales rectos, oblicuos, músculo transverso... por lo que debes incluirlas en tu clase de yoga si quieres aumentar la definición de la musculatura del tronco.
1. El perro boca abajo
Implica flexionar al máximo el tronco hacia adelante, por lo que, tampoco puede faltar en una clase de yoga centrada en fortalecer el core. Estando de pie, deberás doblar el tronco hasta tocar el suelo con las palmas de tus manos y sin despegar los talones. Espalda y piernas quedan completamente rectas para formar una “V” invertida perfecta.
2. La plancha
Es un ejercicio de calistenia que no falta en cualquier rutina del gym cuyo objetivo sea incrementar la fuerza de todo el cuerpo y en especial del abdomen. También es una asana de yoga que consiste en, tumbarte boca abajo y elevar el tronco apoyándote en los antebrazos manteniendo el equilibrio y la postura mientras controlas la respiración.
3. El puente
El yoga es equilibrio y lograr esta postura implica hacer un movimiento inverso al que exigen muchos ejercicios habituales de abdominales. El puente se realiza tumbándote boca arriba con las piernas flexionadas. El movimiento consiste en elevar el tronco manteniendo la parte superior de la espalda pegada a la esterilla. Se trata de subir la pelvis, buscando la máxima curvatura, sin que en ningún momento la asana resulte dolorosa.
4. El saludo al sol
Son la serie de movimientos con los que se inicia generalmente cualquier sesión de yoga. El saludo al sol implica concatenar distintas asanas, siempre con el vientre contraído y manteniendo el equilibrio. Es una excelente rutina, de unos pocos minutos, que servirán para tonificar tu abdomen haciendo yoga.
5. El barco
Esta asana requiere un gran trabajo de toda el área abdominal y una gran concentración para aguantar la postura. Tumbada boca arriba, el ejercicio consiste en elevar ambas piernas a la vez y, seguidamente, subir, también, el tronco hasta formar una “V”, manteniendo el equilibrio con la ayuda de los brazos. La exigencia para la musculatura abdominal es alta y, para muchos, es la postura de yoga más eficaz para definir los abdominales.