El running se ha empezado a practicar de forma masiva desde hace unos años, teniendo un éxito brutal. Miles de personas salen a correr cada día y cada noche, llevando una vida más sana y divertida. Sin embargo, hay algo que los corredores descuidan mucho, es decir, la salud de sus rodillas y de sus pies. Sigue leyendo para conocer algunos consejos básicos para cuidar y preparar tus rodillas y pies para correr cada día.
Consejos para preparar tus rodillas y pies para correr
Cuando corremos, estamos continuamente usando los pies y las rodillas para realizar el movimiento. De esta forma, vamos a forzarlos de forma continua y podemos tener lesiones y problemas en los mismos. Por este motivo, debemos aprender estos consejos para fortalecer tus tobillos para correr, así como tus rodillas, los cuales nos permitirán cuidar nuestro cuerpo y nuestras rodillas de una forma fácil y eficiente.
Escucha a tu cuerpo
En primer lugar, tenemos que escuchar a nuestro cuerpo, es decir, vigilar mucho los dolores y las molestias. Cuando tenemos alguna molestia en la rodilla, en el tobillo, o en el pie, tenemos que vigilar lo que nos pasa. Muchas veces, ese pequeño dolor en el tobillo se convierte en un desgarro muscular si no lo tratamos a tiempo.
Por este motivo, si sentimos dolores en la zona, debemos descansar para evitar forzar en exceso la zona. Además, es conveniente realizarse chequeos médicos cada poco, para así, determinar que tus articulaciones estén en buen estado, ya que no siempre somos avisados de una posible lesión por medio del dolor.
Ropa y calzado adecuados
Mucha gente sale a correr de cualquier manera, con el primer chándal que encuentra y con las zapatillas más viejas que tiene. Aunque ésto esté bien para un aficionado que corre una vez al mes, para una persona que practica running todas las semanas, no es lo óptimo.
Por ejemplo, una zapatilla que no tenga una buena pisada, que sea demasiado apretada o que esté rota, puede literalmente destrozarnos el pie. Por este motivo, lo mejor es no reparar en gastos en zapatillas de running si vamos a correr, porque al final, lo barato sale caro.
Aprende una buena técnica de correr
La técnica correcta para correr, es algo de lo que hemos hablado mucho aquí, debido a su enorme importancia. Cuando corremos, debemos de vigilar la pisada, tratando de apoyar primero la parte delantera del pie y después, la trasera. También, tenemos que tener el cuerpo ligeramente inclinado hacia adelante, y usar los brazos como apoyo.
De nuevo, la técnica correcta ayuda a evitar lesiones. Al optimizar la pisada y la postura para correr, vamos a apoyar mejor el pie y las rodillas, liberando de los mismos mucha tensión. Por ejemplo, si pisas directamente con el talón, vas a apoyar la pierna estirada y las rodillas soportarán todo el peso. Por este motivo, la forma correcta de hacerlo es apoyar la parte delantera, para así, apoyar el pie con las rodillas ligeramente flexionadas.
El sobrepeso es tu mayor enemigo
Finalmente, el sobrepeso se debe evitar a toda costa. Las personas obesas, tienen más peso que soportar y por este motivo, la musculatura y estructura ósea del cuerpo se resiente con más facilidad al correr.
Ésto es paradójico, ya que muchas personas obesas quieren realizar cardio precisamente para adelgazar, y está bien. Sin embargo, lo que tienen que hacer estas personas, es ir bajando de peso poco a poco e ir adaptando el cuerpo antes de correr. Si te sobran unos pocos kilos, podrás correr sin problemas, pero no así con obesidad.
Si tienes obesidad, trata de caminar primero, para ir saliendo así del sedentarismo. También, combínalo con una dieta equilibrada y trabajo en el gimnasio. Después de que hayas bajado unos cuantos kilos, podrás empezar a correr despacio y con tranquilidad, hasta que cojas el nivel físico y técnico suficiente, para poder hacer running.
