¿Te has iniciado en el mundo del running? Correr es un deporte que gana adictos día tras día. Se trata de una actividad que produce numerosos beneficios a nuestro organismo y además, está al alcance de todos los bolsillos.
La práctica del running crece tras el final de las vacaciones estivales. Son muchas las personas que deciden empezar a correr al finalizar el verano, pero con la llegada del invierno y el frío vuelven a abandonarlo.
Correr es un deporte que hay que convertir en hábito o rutina para ver el progreso y los cambios. Abandonar el running a las primeras de cambio y sumergirnos en rutinas sedentarias perjudicará a nuestro organismo. Para evitarlo, descubre 7 trucos para no dejar de lado el running y engánchate a uno de los deportes de moda.
Consejos para no dejar de correr
El frío y el invierno no pueden ser sinónimos de abandono de una actividad física. Aplica una serie de consejos para no dejar de correr y no frenes tu progresión como runner.
Haz el calentamiento en interiores
El frío es uno de los principales factores por los que se suele dejar de correr. Para ello, antes de iniciar tus salidas, realiza un calentamiento previo en lugares cerrados como puede ser tu casa. De esta manera conseguirás que tu cuerpo aumente su temperatura, activando así la circulación de músculos y articulaciones.
Usa el equipamiento adecuado
A la hora de salir a correr con mal tiempo es preferible hacerlo con varias capas que con una que sea gruesa. Practicar el running equipados con una sudadera, además de no ser un tejido transpirable, va a dificultar tu libertad de movimientos.
La mejor opción para equiparse con la llegada del frío son los materiales transpirables y térmicos.
El color de la ropa es importante
Cuando practicas el running o cualquier otra actividad al aire libre con altas temperaturas se recomienda utilizar prendas con colores claros. Con la llegada del frío, se recomienda lo contrario. Los colores oscuros atraen con mayor facilidad los rayos del sol. Lo que provoca que la temperatura de tu indumentaria y cuerpo aumente. De este modo conseguirás entrar en calor antes.
Cuida todas las partes de tu cuerpo
Las extremidades del cuerpo, el cuello y la cabeza son las zonas de nuestro organismo que se enfrían con mayor facilidad. Para evitarlo, utiliza gorros, guantes, y otro tipo de complementos.
Los ojos son otra de las zonas a tener en cuenta. Si te lloran los ojos con facilidad cuando practicas running es aconsejable utilizar gafas de sol.
Alimentación e hidratación
A la hora de salir a correr en invierno, come previamente hidratos. Una barrita energética, cereales, o cualquier otro alimento que conlleve hidratos y azúcares; ya que estos alimentos proporcionar energía y ayudan a entrar en calor.
En cuanto a la hidratación es recomendable siempre antes, durante y después de la actividad física. Además, a bajas temperaturas la garganta se seca, por lo que será todavía más necesaria la hidratación.
Controla tu respiración
Saber respirar en el running es fundamental para la consecución de tus objetivos.
Inspirar por la nariz y expirar por la boca es la mejor manera para respirar durante una actividad física en invierno, ya que antes de que el aire entre en tu organismo lo calientas por la nariz.
Apúntate a alguna carrera
Es uno de los mejores incentivos. Apuntarte a una carrera acorde a tus capacidades físicas puede ser un motivo para no abandonar y tener un objetivo a corto-medio plazo que superar.
No te olvides estirar siempre después de cada carrera y entrenamiento para evitar lesiones.
Si te gusta correr pero te cuesta iniciar tus salidas con la llegada del frío, aplica estos 7 trucos para no dejar de lado el running en invierno.
