Variedad de piedras calientes
Durante una sesión terapéutica se utilizan más de 50 rocas volcánicas, que pueden bordear los 60 grados centígrados, sin llegar a lastimar la piel del paciente. Por medio de estas rocas, es posible efectuar diversos tratamientos.
Uno de ellos, es la exfoliación corporal a base de granos de girasol tostado y aceites esenciales de tomillo, clavo y limón. Su acción elimina las células muertas de la piel.
También, se utiliza en tratamientos de remineralización, estimulando el metabolismo celular. Las rocas se combinan con un concentrado de polvos de fonolita y abedul, ricos en oligoelementos.
En los masajes, las rocas volcánicas transmiten al organismo energía y calor, logrando eliminar la tensión y oxigenando la piel.
Durante una sesión de masajes, el terapeuta coloca una fusión de piedras calientes de Arizona con piedras de mármol paquistaní, sobre los puntos energéticos del paciente, que se encuentran a lo largo de la columna vertebral, el abdomen, la frente, las manos y los dedos del pie.
Finalmente, se aplican los masajes acompañados de aceites esenciales.
