Principios pilates: Concentración, fluidez, precisión, fluidez y respiración
El método pilates cobra cada día mayor aceptación en el medio fitness gracias a las innumerables ventajas sobre sus practicantes. Diferente a otras disciplinas deportivas, con pilates se logra el equilibrio perfecto entre esfuerzo y resultados.
Conozcamos cual es la base de esta popular técnica que ha dado la vuelta al mundo esparciendo sus conocimientos y ganando con ello muchos adeptos.
Mientras desarrollas tu rutina diaria mantén tu CONCENTRACIÓN activa e interrelacionada con cada movimiento que realices. La idea es que la comunicación entre cuerpo y mente se produzca en todo momento casi espontáneamente.
Cuando has logrado concentrarte, el resto vendrá como una cadena de resultados. EL CONTROL sobre tu cuerpo será posible gracias a los estímulos que desde tu cerebro serán emitidos.
Con la CENTRALIZACIÓN Pilates propone el mantenimiento de la zona media del cuerpo (músculos abdominales, cintura pélvica, la columna lumbar y los glúteos). Llamada así la “Central eléctrica” porque es la encargada de sostener los órganos internos y corregir los errores posturales traducidos en dolores de espalda.
Cada ejercicio necesita realizarse con PRECISIÓN ya que todo tiene un objetivo específico, obsérvate mientras trabajas en cada movimiento y nunca te apresures mostrando más energía que la requerida. La FLUIDEZ o la cadencia en la práctica es lo aconsejable para evitar lesiones.
Finalmente, en pilates la RESPIRACION cuando es dirigida correctamente se convertirá en la base para que los ejercicios se den con mayor fluidez y precisión.