La meditación ha ido adquiriendo popularidad en el mundo occidental en los últimos años, sin embargo, esta práctica oriental tiene una trayectoria milenaria. La meditación es una de las formas más populares de relajarse, ya que a través de una serie de ejercicios se busca parar la actividad de la mente y liberarla de pensamientos.
La meditación se puede practicar de forma indipendiente o como complemento a las técnicas de relajación, ya que busca liberar la mente y dejar paso a la paz de espíritu. Una de las principales ventajas de la meditación, es que puede ser practicada por cualquier persona.
El objetivo principal de la meditación busca contribuir a la mejora de la calidad de vida de la persona aportando salud y bienestar. Para ello, mediante una serie de ejercicios se busca reducir los niveles de estrés y liberar la mente de los condicionantes estresantes de la vida diaria.
La importancia de la música en la meditación radica que en el hecho de que este tipo de música en muchas ocasiones contribuye a la creación de una atmósfera correcta para la práctica de la misma, además de acompañar la práctica de los ejercicios.
Tipos de música para meditar
Los expertos y aquellos que practican la meditación de forma habitual recomiendan acompañar los ejercicios de meditación con piezas musicales de los siguientes géneros o estilos:
- Sonidos de la naturaleza: son frecuentes utilizar sonidos que incluyen el cantar de las aves, el sonido de la cascada, el olaje del mar, la lluvia o el viento.
- Música clásica: es una de las opciones más populares de las personas que practican de forma habitual la meditación. Se recomienda elegir composiciones con predominio de instrumentos de cuerda.
- Música instrumental: es de las más utilizadas para lograr alcanzar un estado de relajación de la mente y meditar.
También es posible realizar ejercicios de meditación acompañados de "El sonido Alfa", que consisten en una serie de vibraciones que ayudan a poner las ondas cerebrales en estado Alfa, y llegar así a un estado de relajación y control mental.
Independientemente del tipo de música para meditar que se utilice, los expertos recomiendan que no tengan letra, ya que es posible que distraiga a la persona.
