Los errores que evitarán que pierdas peso en el gimnasio

errores que evitan perder peso en el gimnasio



Llega la hora de cuidarse. Lo cierto es que el ejercicio y una buena alimentación conforman una base estupenda para poder perder peso. No obstante, aunque pensemos que con ir al gimnasio y realizar unos cuantos ejercicios será suficiente, conviene estar atento y evitar algunos errores que pueden frenar nuestra pérdida de peso.

Hacer ejercicio una o dos veces a la semana

Está claro que todo lo que consigamos movernos será bueno para nuestro cuerpo. No obstante, en esto de la pérdida de peso la constancia y regularidad es clave. Para ello, debemos crear un hábito de actividad que nos ayude a activar nuestro metabolismo, perder peso y lograr mantenernos después.

Entrenar dos veces a la semana y hacerlo de forma intensa no sólo no será suficiente, también puede terminar en una lesión, pues muchas veces intentamos aumentar el ritmo para compensar los días que no hemos entrenado y forzamos demasiado nuestro cuerpo.

Hidratación: con agua basta

Tendemos a pensar que las bebidas isotónicas son necesarias en nuestro entrenamiento. Estas bebidas son realmente buenas para reponer líquidos y electrolitos, pero en entrenamientos duros, cuando corremos por más de dos horas o realizamos alguna competición, por ejemplo. Si vamos una hora al gimnasio no necesitaremos estas bebidas, con una simple botella de agua lograremos estar hidratados y no sumar más calorías a nuestra dieta.

Centrarnos únicamente en los aeróbicos

Si bien es cierto que los ejercicios aeróbicos son los más recomendados para adelgazar, lo cierto es que no son los únicos que nos ayudarán a perder peso. Si queremos adelgazar de forma sana, también es necesario usar las pesas; y es que los ejercicios con pesas nos ayudarán a mantener la masa muscular y ayudará a que nuestro metabolismo esté mucho más activo, además de moldear nuestras zonas más flácidas.

Ingesta de comida descontrolada

No penséis que por hacer una hora de ejercicio diario ya contáis con manga ancha para poder comer más. Si no reducimos la ingesta de alimentos nuestro cuerpo no perderá los kilos que queremos.

Así, lo que si podemos hacer es intentar cambiar los alimentos más calóricos por un mayor número de frutas y verduras, por ejemplo, sin dejar las proteínas o los hidratos a un lado, evidentemente, pero evitando productos menos saludables como la bollería industrial, entre otros.

Obsesionarse con los abdominales

Sin duda alguna, la barriga es la parte de nuestro cuerpo que menos nos gusta y más queremos trabajar al empezar en el gimnasio. Aun así, conviene que no nos obsesionemos con ella. Focalizar el entrenamiento en nuestros abdominales nos impedirá trabajar otras zonas del cuerpo de forma equilibrada.

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