¿Eres un apasionado del running? ¿Salir a correr forma parte de tu rutina de entrenamiento? Incluir esta actividad de cardio proporciona numerosos beneficios para la salud de tu organismo.
A la hora de salir a correr, más allá de usar el equipamiento adecuado, deberás aplicar una serie de consejos para garantizar la correcta práctica. Si eres un runner principiante o te gusta empezar tus salidas a alta intensidad, es probable que sientas el cansancio y la fatiga en los primeros instantes de tu carrera y que lo arrastres durante todo el entrenamiento. Si te preguntas si es posible correr más sin cansarse, sigue una serie de recomendaciones y disfruta al máximo del running.
Cómo puedes correr más sin cansarte
El running es un ejercicio que trabaja la resistencia aeróbica, por lo tanto el sistema cardiovascular es más fuerte y potencia los músculos y articulaciones del cuerpo, sobre todo de las piernas. A pesar de ello, realizar esta actividad sin unas técnica previas evitará el desarrollo de ciertas funciones por la pronta aparición del cansancio. Descubre cómo puedes correr más sin cansarte y aplica las recomendaciones en tu rutina de entrenamiento.
Trabaja bien tu calentamiento
Uno de los principales errores de los runners principiantes es lanzarse a correr y alterar las pulsaciones rápidamente . A la hora de practicar el running debe haber un proceso de aclimatación para que el cuerpo entre en calor. Este calentamientos -de aproximadamente 10 minutos-, activará tu sistema cardiovascular y circulatorio, favoreciendo una ejecución más eficiente y por más tiempo. Además, el riesgo de padecer una lesión durante tu entrenamiento disminuye considerablemente.
Aplica la regla del 10%
La regla del 10% en el running hace referencia al alargamiento de tus tiradas. Cada semana que efectúes correctamente tu plan de entrenamiento deberás aumentar un 10% la distancia que estabas realizando. Solo de este modo conseguirás el progreso en este deporte sin sofocarte, sin fatigas, y sin caer en un posible sobreentrenamiento.
Reduce el ritmo en función de lo que marque tu cuerpo
Cuando salgas a correr es posible que los síntomas del cansancio o la fatiga puedan aparecer. Si sientes que tu respiración se entrecorta o tienes dificultad para respirar, céntrate en tu verdadero objetivo que es mejorar tus distancias. Para ello, reduce el ritmo de tu zancada y tus músculos se adaptarán y dejarán de sentirse tan fatigados. Una vez controles y mejores tu capacidad de resistencia ya puedes pasar a trabajar la velocidad.
Concéntrate en tu respiración
La respiración en el running es un elemento fundamental. Más allá del ritmo o la distancia que lleves recorrida, seguir una serie de parámetros de respiración prevendrán la fatiga y la falta de aliento. Para ello sigue la regla de 3 a 2. Esta técnica consiste en realizar la respiración cada 3 y cada 2 pasos. Inhala por la nariz y por la boca para maximizar el aire de los pulmones. A la hora de exhalar, hazlo por la boca y asegúrate que expulsas todo el aire de tus pulmones.
Escucha música
Escuchar música durante el running, más allá de amenizar tu entrenamiento te ayuda a coordinarte con tus pasos y tu ritmo. De este modo, el apoyo de la música reducirá los síntomas de fatiga y cansancio, ayudándote a realizar tiradas más largas.
Ahora ya sabes cómo correr más sin cansarte. Aplica estos consejos cada vez que salgas a correr y observa cómo mejoran tus resultados en el running.
