El mundo del fitness está en constante revolución, surgen nuevas técnicas que requieren que las empresas se adapten a ellos, con el fin de poder ofrecérselos a sus clientes. El mercado del fitness vive una época de bonanza debido a la filosofía del culto al cuerpo que se ha instaurado en la sociedad.
La forma más adecuada de ofrecer estos servicios es saber conjugar la formación de los monitores y la buena diversificación de productos en las empresas. Las exigencias de los usuarios son cada vez mayores, el cliente busca servicios más personalizados, con los que obtenga un buen seguimiento de su entrenamiento, a su vez, también exigen poder aprender con estas nuevas técnicas.
En cuanto a las empresas, como, por ejemplo, los gimnasios, la adaptación a este mercado del fitness tan cambiante radica en la creación de buenas campañas de lanzamiento de las nuevas técnicas o productos, acompañadas de una buena planificación que les asegure difusión. En definitiva, su función es conseguir fidelizar al cliente y buscar aquello que los distinga de sus competidores.